
El deterioro mental perceptible en los alcohólicos tiene poco que ver con esa asentada leyenda urbana. Para aniquilar cualquier tipo de célula, se necesitan altísimas concentraciones de alcohol –próximas al 100%–, y empezamos a emborracharnos a partir de un nivel en sangre del 0,1%.

Francisco Javier Fernandez http://ift.tt/11Szaf6
http://ift.tt/11Szaf6
http://ift.tt/1ez4hy7
No hay comentarios:
Publicar un comentario